El desafío
Este trabajo tenía tres desafíos: espacio limitado para instalar un nuevo sistema, nivel de agua casi en la superficie y un área restrictiva que no podía acomodar los sistemas tradicionales. Estas restricciones hicieron imposible instalar una solución séptica estándar.
La solución
Para enfrentar los desafíos, se utilizó el sistema séptico SludgeHammer®. Limpia el efluente dentro del tanque séptico utilizando aire y bacterias, lo que produce agua más limpia. Esto permite usar tuberías más pequeñas, riego por goteo y no necesitar grandes cantidades de piedra o arena. El sistema también permite un montículo más pequeño y menos visible, aprobado por el departamento de salud. Los beneficios adicionales incluyen una distribución uniforme del agua en el campo de drenaje, una percolación y evaporación eficientes a través de la acción capilar, materiales resistentes a las raíces y la prevención de la acumulación de biomas, que son causas comunes de fallas sépticas.